La Plataforma Apostólica de Castilla y León ha celebrado un encuentro presencial este sábado 12 de febrero en Cristo Rey, Valladolid. Un encuentro con 52 participantes de León, de Salamanca, de Burgos, de Valladolid y de Villagarcía y el provincial de España, centrado en descubrir la aportación de sus obras, de sus comunidades y de sus instituciones a una misión mayor a través de las cuatro Preferencias Apostólicas. Un camino compartido que requiere relaciones, diálogo, escucha para conocer, cuestionar y transformar.
Antonio España analizó el contexto actual en el que se abre paso la misión de la Compañía de Jesús -diferencias sociales, dependencia digital, inseguridad, secularización-, donde las preferencias nos impulsan ante los problemas de hoy: una profundidad mayor del significado de la vida y el propósito de cada ser humano ante Dios y en Cristo; una mirada a los excluidos que crecen en nuestra sociedad, víctimas de violencia y agrandamiento de diferencias; la soledad y vulnerabilidad de los jóvenes, ante sí mismos y ante el futuro. Y el deterioro de la Casa Común. «Se necesita una comunidad que nos sostenga, que nos ayude y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar hacia delante».
La segunda parte del encuentro ofreció una visión concreta de las cuatro preferencias: Cristóbal Jiménez, director del Centro Espiritualidad San Ignacio (Salamanca), abordó la primera, Mostrar el camino hacia Dios por medio de los EE y el discernimiento. Aportó herramientas para desarrollar una «pedagogía de la búsqueda», que genere experiencia personal: el examen del día y la conversación. Siguió Eduardo Menchaca, coordinador de Red Incola (Valladolid) para adentrarse en el Caminar con los excluidos en misión de reconciliación y justicia. Invitó a enfocar la mirada, a ponerse en los zapatos de los excluidos, para aprender de la realidad herida. Una mirada que ayude a emprender un proceso de acompañar, de servir, de conocer, de sensibilizar e incidir.
Berta Melgosa, jefa de estudios del colegio San José, habló de la tercera preferencia: Acompañar a los jóvenes en la construcción de un futuro esperanzador. Invitó a poner en valor a los jóvenes, por lo que son, con sus carencias y con sus cualidades, para acompañarles en el momento vital y social en el que se encuentran. Y cerró Félix Revilla, director de INEA (Valladolid) con el repaso de las preferencias con la del Cuidado de la casa común. Desgranó la llamada urgente al cambio de paradigma manifestada en la Laudato Si´ y que exige respuestas concretas e inmediatas.
Después llegó el trabajo por grupos. Un momento para reflexionar juntos sobre la contribución de cada una de las obras teniendo presentes las Preferencias Apostólicas. Cada grupo ofrecía las claves para aterrizarlas en el área donde trabaja. De ahí salieron ideas, propuestas, claves concretas para desarrollarlas. Y mostró claramente cómo cada una de ellas forma parte de la misión que germina en lo local y contribuye a la misión universal.
Lo compartido siguió presente en la comida e inspiró la eucaristía concelebrada por Antonio España, Joaquín Barrero y el delegado Gérar Villar. Compartido el pan, la mesa y el sueño de la misión, cada uno volvió a su lugar de origen, agradecido y esperanzado.