Dios nos ha creado para ser amados por Su amor y no para ser destruidos por nuestro odio. Red Incola, Entreculturas y el Centro Loyola Mag+s de Valladolid se unieron este jueves para orar por la paz en el tiempo de Adora y Confía y rememoraron palabras como éstas de la Madre Teresa de Calcuta. Estas palabras corresponden a un escrito enviado el 2 de enero de 1991, mientras el mundo vivía la cuenta atrás a la guerra del Golfo. Entonces se enfrentaron las fuerzas de las Naciones Unidas, capitaneadas por Estados Unidos, y el ejército de Irak. Hoy, estas palabras siguen teniendo significado, con otras guerras, otros gobernantes, otros pueblos que sufren. Oremos, porque la PAZ de Dios, que supera todo lo que podemos imaginar, tomará bajo su cuidado nuestros corazones y nuestros pensamientos en Cristo Jesús.
En el altar lucían elementos que guiaban la oración. Una gran paloma de la paz, de colores vivos, presdía el espacio iluminada de velas y farolillos. Todo invita a unirse a la reflexión de la Madre Teresa: A corto plazo puede haber ganadores y perdedores en esta guerra que todos tememos, pero ello nunca puede, nunca podrá justificar el sufrimiento, el dolor y la pérdida de vidas que provocarán sus armas.
El gesto compartido -recoger alguna de las huellas dipuestas en los pasillos y llevarlas hasta el altar, al pie de la paloma de la paz- expresaba el deseo de escoger el camino de la paz. Dejen que triunfen el amor y la paz y que sus nombres sean recordados por el bien que han hecho, la alegría que han repartido y el amor que han compartido.